viernes, 22 de junio de 2012

Moyano y su retroceso táctico (y estratégico)




Por Eduardo Castilla y Nicolás del Caño

Con el acuerdo firmado por poco más del 25% y el llamado a un paro el miércoles de la semana que viene, Moyano retrocede claramente de la acción que venía impulsando. Cambia una medida de fuerza de acción directa por una pelea política que puede transformarse en campaña, ir acompañada de movilizaciones, pero donde la lucha hasta “imponer sus condiciones” al enemigo, queda postergada en el tiempo.
Como dijo Schmidt ayer "Si se abre la posibilidad de diálogo puede haber posibilidades de solución", poniendo de esta forma la pelea en el terreno del régimen político, tendiendo un puente a la negociación con el gobierno. De este modo confirma lo que ayer escribimos “Precisamente su carácter de oposición burocrática le impide tomar verdaderamente las demandas de sectores más amplios de la clase trabajadora y el pueblo pobre, aunque en su discurso de anoche haya hablado de los docentes, denunciado los pésimos salarios de los trabajadores de comercio y atacado el trabajo informal. La burocracia sindical, en tanto casta privilegiada y policía política del movimiento obrero en su conjunto, no puede tomar más que parcialmente estas reivindicaciones y siempre quitándole todo el filo posible”
No sólo fue incapaz de tomar las reivindicaciones de sectores más amplios de los trabajadores, sino que incluso no llevó hasta el final su propio programa (aumento del 30%) y terminó negociando por mucho menos. A pesar de que mantenga el reclamo de terminar con el impuesto a las ganancias y convoque a paro y movilización para la semana que viene, es claramente un freno a una acción verdaderamente contundente que estaba poniendo al gobierno frente a un desafío central. 

Las razones del retroceso

Cuánto jugó la interna de la burocracia sindical es todavía una incógnita. Hasta el momento, sólo pudieron hacer hablar a ultra alcahuetes como Andrés Rodríguez o Yasky a favor del gobierno. La realidad es que Moyano toma un tema que toca a cerca de 2.5 millones de trabajadores. Si bien, como correctamente señala Paula Varela acá se trata de un programa elitista, al mismo tiempo la da una relativa base en los sindicatos, lo que dificulta al conjunto de los burócratas enfrentar a Moyano. En la medida en que transcurran los días iremos viendo como aparecen nuevos dirigentes oficialistas “de oficio” (ayer menemistas, hoy kirchneristas) a atacar la medida de fuerza del miércoles.  
Por otro lado, por lo que señalan algunos medios, parece haber jugado la interna al interior del mismo pejotismo. Acá se dice que “Moyano cuenta con una ristra de mandatarios que han padecido sus avasallantes métodos. Los intendentes conurbanos, constantemente jaqueados por la recolección de residuos, son el ejemplo más conspicuo, que no el único”. Por otro lado, en esta nota se agrega que “Los municipios van a abroquelarse en defensa del gobierno nacional porque de algo hay que vivir, y mientras no haya, y no lo va a haber, un alineamiento de Scioli con Moyano, lo mejor es esperar a que todo termine lo más rápido posible”
Los intendentes del PJ pueden haber jugado un papel, en el marco de que dependen de la caja y el bonapartismo fiscal de CFK. Un escenario de desabastecimiento y crisis los golpeaba directamente. De allí que seguramente estuvieron en la vereda del frente al moyanismo.

Un poder de fuego controlado

Pero al mismo tiempo, Moyano demostró su poder de fuego. Es decir, demostró el poder que tiene un sector central de la clase trabajadora. Abrió una crisis y la cerró. Como se dice acá “Es cierto que Moyano levantó el pie del acelerador pero como decimos más arriba su poder de daño quedó demostrado con los bloqueos”
Por más que el gobierno se muestre triunfador, la realidad es que el retroceso de Moyano no es resultado de la fuerza del gobierno, ni la “clara ubicación” de los dirigentes políticos K como Mariotto o Berni, sino la decisión de la misma conducción de Camioneros.  
El breve episodio de acción directa y confrontación abierta abría una escenario donde otros sectores podían tomar la posta como, por ejemplo se vio en pequeño acá, lo que podría generar una situación donde el reclamo se volviera motor de movilización de franjas más amplias, obligando incluso a burocracias recalcitrantes a tomarlo como un reclamo activo.
Este escenario de tendencias a la acción directa más de conjunto se cerró con el acuerdo de Moyano. Como se señala acá “La convocatoria a la jornada de protesta con paro y movilizaciones, proyectada en principio para el miércoles próximo desde la CGT, es también dura, pero carece del dramatismo que hubiera tenido si empezaba hoy, cuando todavía había largas colas de automovilistas ansiosos por conseguir nafta.”

Oposición política y oposición social

Pero al mismo tiempo, la acción de Moyano y el llamado al paro del próximo miércoles, abren un escenario donde un sector importante de la clase obrera pasa a la oposición política al gobierno. De ser oposición social en una innumerable cantidad de conflictos, pega un salto hacia una pelea abierta con el gobierno.Como ya se ha señalado, esto se hará con el objetivo de aportar a reconstruir una alternativa política patronal que tiene hoy muchos límites. 
Pero eso no quita que el escenario abierto sea favorable para el desarrollo de corrientes político-sindicales al interior del movimiento obrero. Corrientes militantes que tienen que tomen en sus manos la pelea por el programa que enarbola Moyano, pero al mismo tiempo luchen por todas aquellas demandas que no entran en el pequeño costal de la burocracia sindical, como el fin del trabajo en negro y la precarización laboral, el derecho a la vivienda digna de millones, el salario igual a la Canasta Familiar, entre otras demandas.
En el escenario político que parece abrirse, se plantean mejores condiciones para llevar adelante un política que vaya en este sentido, manteniendo una clara posición política independiente de todas las alas de la burocracia sindical, por más que hoy pasen a la oposición y enarbolen un discurso de denuncia de todos los males que sufre la clase trabajadora. Avanzar en ese camino es parte de las tareas que tiene por delante la Conferencia Nacional de Trabajadores del PTS.

No hay comentarios:

Publicar un comentario